domingo, 30 de junio de 2019

MIEDO Y ASCO EN LAS VEGAS

Dir.: Terry Gilliam
1998
118 min.

La recepción general de la peli se limita a la faceta de la diversión con las drogas pero creo que es mucho más completa. Para empezar, lo cómico no creo que sea su aspecto principal. Sí, evidentemente te ríes. Pero creo que es mucho más importante el sufrimiento que les causa. La peli empieza con las alucinaciones de Johnny Depp. No se lo está pasando muy bien. Ahí llega el papel del espectador quien asimila la situación de los personajes de forma cómica o dramática.

Cuando Johnny Depp se comporta como Johnny Depp y hace gestos de Johnny Depp para aportar comicidad a su personaje es cuando resulta mucho menos interesante. El personaje no necesita ser gracioso. Su aspecto ya hace todo lo necesario.

Creo que es muy interesante cómo actúa buscando la normalidad. No todo es fiesta. Cuando está drogado también necesita comportarse como una persona normal. Lo cual es un reto absoluto. Resulta cómico. Pero no creo que sea el objetivo de esas secuencias.

Los efectos de la droga están maravillosamente conseguidos con cámaras nunca paralelas al suelo, fotografía con colores distorsionados y ruidos continuos y estridentes.

Ocurren escenas muy divertidas como la carrera de coches y motos. De nuevo, no producida por las drogas. Una estética rollo “Mad Max” polvorienta y muy tóxica. La cara cubierta de Johnny Depp para poder respirar en esa atmósfera mortal es una imagen inolvidable.

La crítica al sueño americano no me llama tanto la atención aunque es parte fundamental de la peli. Las banderas americanas por todas partes. América: tierra de libertades excepto si nos tocas la moral tradicionalista. También es llamativo el cartel Posesión: 20 años. Venta: cadena perpetua. Si estás haciendo dinero a nuestras espaldas, es cuando nos cabrea.

Una película muy interesante y que con suerte puede resultar divertida.


sábado, 29 de junio de 2019

LA LA LAND (LA CIUDAD DE LAS ESTRELLAS)

Dir.: Damien Chazelle
2016
127 min.

Es una peli que como musical es muy espectacular en cuanto a la música, coreografías, vestuarios vintage, montajes… Cuando pretende ser otra cosa, normalmente un drama, no le sale tan bien.

La primera escena es una gran carta de presentación. Un gran número musical muy llamativo y con cosas muy guais. Está bien que se considere casi la sublimación del género musical. Como queda constado al abrir un camión y que salga una puta banda de dentro, con contrabajos, timbales y uniformes. Otro momento es la gran fiesta. Ahí mientras la chica canta entre la multitud la gente empieza a moverse a cámara lenta. O el hecho de que cuando se sientan en el mítico banco ella sustituya sus zapatos de tacón por unos zapatos de claqué.

Ryan Gosling tiene un papel algo más complejo que los que acostumbra. Sin embargo su interpretación es siesa como siempre. Es un tipo así con mucha personalidad. Cuando toca el piano sí parece incluso emocionado pero en las conversaciones con la chica mantiene su cara de profundito.

Siempre que cantan todo va como la seda. Cuando se entra en conflicto es siempre por culpa de errores de los protagonistas. De esos apuros siempre les sacan las circunstancias de su alrededor. El desencadenante del final es una historia de perseguir los sueños y qué pasa si haces lo que realmente quieres y no lo que se espera de ti. Esto no hay quien se lo trague. No hay un conflicto real. Solo unos personajes que no saben administrar su situación a pesar de que todo les es favorable. Ryan consigue un trabajo que es temporal para poder emprender él su bar y ella su obra de teatro. Él lo hace porque es lo que la pareja necesita. En lugar de tenerlo en cuanta, ella considera que su vida es un fracaso y hace muchas estupideces. Ella se endeuda con el teatro, él cobra 1000$/semana y con posibilidad de cobrar más. Pero ella decide que está en la ruina.

No sólo eso, es que cuando él tiene asuntos de trabajo que atender y debe faltar al estreno de la obra de su mujer, ella entra en cólera a pesar de que él le está pagando toda su aventura personal. Una aventura de un egoísmo mayúsculo, así la obra que escribe la protagoniza ella sola. Todo lo hace ella. Ella escribe, ella produce y ella interpreta. Con este encerramiento en sí misma es capaz de reprocharle a su chico que esté pendiente de lo que la gente piense de él. ¡Cómo va a actuar de otra manera si su trabajo, sus ingresos todo depende de lo que la gente piense de él!

El último gran número y el final son muy maravillosos. Todo el ensueño está hecho en decorados claramente falsos. Hollywood es la ciudad de los sueños y eso es lo que está representado. La peli no nos cuenta lo que podría haber sido, sino lo que a los protagonistas les habría gustado que hubiera sido. Y la peli lo acepta de una forma muy madura. Antes de ello hemos tenido la secuencia inmediatamente anterior a que ella viaje a París. Tienen esa conversación en la misma colina donde han tenido los otros grandes momentos. Pero en este caso están en la parte trasera del observatorio. Aquí están viendo la parte más fea de los sueños.

Hay una elección muy inteligente que es el jefe de Gosling interpretado por el calvo de “Whiplash”.

De muchas formas distintas la película apela a “Casablanca”. A veces se la menciona explícitamente, pero la referencia más clara es cuando se está haciendo la recapitulación final. Cuando llega al punto en el que ella debe viajar a París es una clara referencia a los mapas con los que abre “Casablanca”. La despedida con la mirada de ambos protagonistas parece recordar el siempre nos quedará París.


viernes, 28 de junio de 2019

LA GRAN BELLEZA

Dir.: Paolo Sorrentino
2013
142 min.

El título hace honor a la película. Habla sobre la alta sociedad italiana. Un hombre de avanzada edad que se hizo famoso por una novela y desde entonces se ha dedicado a disfrutar de su fama y, sobre todo, de su dinero. En lo que él llama, la vorágine de la mundanidad. No se avergüenza de ello. Simplemente le ha aburrido. Cuando le hace ver a una de sus amigas que ella no tiene una vida sacrificada, que nada de lo que hace es muy relevante ni siquiera lo dice para que se replantee su vida, solo que sepan que su único objetivo es la estética.

La presentación de su persona es genial. Vemos que no es un hombre simple. Es profundo con pensamientos que le hacen ser superior a los demás indudablemente. Debe pertenecer a la élite y se crea un discurso donde sustentarlo.

Es un festival de la vida que ellos llevan. Es vacía pero, ante todo, es bella. Es gente cuya única preocupación es su propio recreo. Pues se dedican a disfrutar de las cosas bellas. De cuerpos bellos, de música clásica, la más perfecta escrita; (aunque después en sus fiestas privadas escuchen a Rafaella Carrá) la arquitectura de Roma…

En un funeral del hijo de una familia rica el cura dice que los amigos del muerto cojan el ataúd y lo saquen de la Iglesia. Nadie se levanta. Entonces 4 ricos, que apenas conocían al chico, se levantan y lo sacan. No lo hacen por él. Simplemente un funeral es un espectáculo que se tiene que llevar a cabo. De hecho, esa escena está prologada con una tienda de ropa en la que eligen qué se pondrán. Todo debe ser impecable.

La cara del protagonista siempre con una cara de comodidad. Cierta superioridad. Pero no se pavonea. Solamente, Roma es suya. Es algo bello de lo que él va a disfrutar. Donde juega un papel importante la luz. Todo lo que s bello tiene luz propia. Cuando ve a su primera novia, ella brilla. Están en mitad de la noche, cuando ve su cuerpo, se le ilumina la cara. Todo brilla. La iglesia es oscura, apagada. El cardenal, a quien le confía la salvación de su alma, es oscuro. No está ahí tampoco su belleza.

Los simbolismos no son demasiado sutiles. El primer momento, cuando abre su corazón y cuenta a sus amigos la vida mundana que llevan está seguido de una piscina con corriente donde un rico nada hacia delante sin moverse. Más adelante dice que los trenes de sus fiestas (refiriéndose a sus congas) son los mejores trenes de Roma porque no van a ningún sitio.

Por cierto, sale el Costa Concordia.


domingo, 23 de junio de 2019

PERFECTOS DESCONOCIDOS

Dir.: Álex de la Iglesia
2017
96 min.

Hola, la peli no muy bien. La conclusión de la peli es infantil y transmite un mensaje casi tóxico. La moraleja no es que haya que comportarse bien deontológicamente sino que hay que portarse bien porque hay tecnología que registra todos nuestros fallos.

La trama tiene fallos pero son aún peores los diálogos. Las interpretaciones están, por lo general bien. Podemos darle el premio a peor actor a Eduardo Noriega como ya ocurrió en “Tesis”. Pero los diálogos están repletos de chascarrillos que pretenden recrear una conversación distendida pero que necesitan una actuación o un tono general de la peli muy distinto para que quede bien. Véase “Verano 1993”.

Ocurren cosas que, como espectador, no podemos pasar por alto. Por ejemplo que se trata un intento de asesinato por parte del personaje de Ernesto Alterio hacia su mujer casi como si fuera un pequeño y divertido gag para añadir locura a esta disparatada y divertida cena. Una reacción que, por otro lado no es propia de este personaje. Él se ha asustado muchísimo cuando han estado a punto de descubrir su ‘infidelidad’. ¿Por qué de repente una actitud tan violenta hacia la infidelidad de su mujer? Fallo en la construcción del personaje.

Se hace una cosa que ocurre con frecuencia en el cine español: presentar la trama como un comentario casual. Anda que menuda cosa lo del eclipse. Muy cansado de esta cosa.

Además hay personajes que manifiestan su deseo de jugar aun teniendo tantísimo que esconder. Reaccionando como si fuera una sorpresa que se descubran sus chanchullos.

Sí está muy bien la conversación de Eduard Fernández con su hija. En general toda la relación entre esos dos personajes. Supongo que el hecho de que sea el personaje más correcto moralmente ayuda a que el público empatice con él. Como la peli no termina con él triunfal, es ampliamente insatisfactorio a pesar de que el tono del final es como un final feliz. Un final feliz desencadenado por una decisión estúpida a nivel de guion y a nivel de decisión del personaje de Belén Rueda. Es muy iluso creer que el conflicto de la trama ha sido desencadenado por culpa de los móviles. También es iluso creer que tirando el móvil haces una especie de redención.


sábado, 22 de junio de 2019

BARTON FINK

Dir.: Joel Coen
1991
113 min.

Gran espíritu Coen. Con la diferencia de que te acostumbran a mucho rato de normalidad, una trama muy poco estrafalaria y cuando parece que todo va a desembocar en un final más o menos feliz, de repente hacen su magia. Nos presentan un infierno lleno de fuego y sufrimiento.

La peli va de un escritor de teatro reflexivo de éxito al que le contratan para escribir una peli de serie B sobre lucha libre. Afronta una crisis creadora en una habitación de un hotel inmundo que simboliza el sufrimiento que él asegura es motor necesario para la creación. Se produce aquí un juego muy bonito que no entendemos hasta el final. Entabla conversación con el tipo gordo que vive en la habitación de al lado. Barton le asegura que le fascina su sufrimiento vital. Y al final de la peli le dice: Tú eres solo un turista con una máquina de escribir, yo vivo aquí. Reprochando al artista que quiera vivir en el sufrimiento aprovechándolo solo para escribir.

La habitación del hotel sudorosa. Con paredes pringosas que se caen… Toda esa estética está muy elaborada. Ese feísmo con colores crudos y anodinos. Esos planos que nos hacen confundir paredes con suelo y viceversa. Muy bien construida esa especie de celda.

No es tan interesante la relación con el escritor de éxito que se descubre un farsante. De todas formas es un sello necesario de los Coen el meter personajes heroicos que más adelante van a derrumbar. Además, de alguna forma había que justificar el asunto con la chica muerta y esta es una buena forma. Me gusta mucho que no haya ninguna explicación al respecto de qué ocurrió con ella. También la caja que le dan al director queda sin explicar. Se puede intuir que dentro habrá una cabeza pero mejor así.

Si hay algo que criticar es la actuación de John Turturro, el protagonista. Los momentos de euforia son muy poco, ni siquiera verosímiles, sino consistentes. El baile con los marines a la espera de embarcar para la II Guerra Mundial tiene una alegría interpretada casi como Nicolas Cage. Además de cuando en cuando, Barton toma decisiones muy poco inteligentes.


viernes, 21 de junio de 2019

DOS O TRES COSAS QUE YO SÉ DE ELLA

Dir.: Jean-Luc Godard
1967
95 min.

Los títulos de crédito ya anuncian una estética anticuada. No se va a perder durante toda la película pero no es tan acusada como en el cine de Almodóvar. Lo que más molesta de esta estética es la fotografía en exteriores, en general colores azulados pero los blancos muy quemados. Muy parecido a lo que ocurría en Tatí.

La peli tiene una temática muy temporal. La guerra de Vietnam y el capitalismo son sus dos principales focos de ataque. Esto es interesante porque no hay muchas películas que lleven el intelectualismo de Sartre y Herman Hesse a imágenes. Por supuesto no he visto ninguna antes que ataque la sociedad capitalista de esta forma. Además hay referencias al límite del lenguaje al estilo de Wittgenstein.

Hay una escena bastante larga en una cafetería donde conversa un escritor comunista con una estudiante que conoce su obra. Él se dedica desmitificarse y es divertido ver el aire de intelectualidad que ha tenido la filosofía siempre. Además aquí es más llamativo porque aún no nos parecía mal que un hombre adulto embelese tan descaradamente a una estudiante admiradora.

Lo cierto es que la fórmula es muy atractiva. Una historia de víctima del capitalismo contada en primera persona cuando hace falta, susurros de un narrador con imágenes sugerentes, testimonios de personajes a los que no volvemos a ver explicando su miseria… Las reflexiones filosóficas no están mal aunque un poco anticuadas también. Ahora no son esos asuntos los que nos preocupan.

La crítica que le hago es la de siempre: falta narrativa. Supongo que no hay otra forma de reflexionar si no es quitando las cosas que pasan pero para mí eso es imprescindible.

Formalmente hay cosas curiosas como los primeros planos que recortan barbilla o frente. Es llamativo que a pesar de que el zoom es mayor que los primerísimos planos de Lynch, no se produce ese sentimiento invasivo de las caras de él. Además cuando el narrador empieza a reflexionar quita cualquier otro sonido ambiental. Esto contrasta con los sonidos de una ciudad en obras. Hay planos que se repiten para mostrar que el lenguaje no puede expresar todo… Si no hubiera sido tan aburrida habría estado bastante bien.


domingo, 16 de junio de 2019

PERSONA

Dir.: Ingmar Bergman
1966
81 min.

Me resulta muy difícil hablar de Bergman. Siempre tengo la sensación de que no sé lo suficiente para poner en contexto sus películas. Es un tipo muy introspectivo, habla mucho del alma y de vivencias que supongo se reconocen con la edad. Hay muchas reacciones de los personajes que no se entienden demasiado. Todos los sentimientos están siempre a flor de piel. Se enfadan, lloran, odian su pasado. Son sufridores natos y esta película no es una excepción. Creo que puedo sentenciar que no la he entendido y que ha sido la que más me ha gustado de las pocas que he visto suyas.

Que Bergman sabe de cine se demuestra a cada plano. Desde las primeras imágenes donde vemos por primera vez a nuestras protagonistas vemos un maestro tras la cámara. Esos planos tan cercanos, con el formato del fotograma con las mismas proporciones que un rostro. Las caras llenas de sombras marcando los poros, las cuencas de los ojos, el vello facial… Esa mujer tumbada en la cama medio a oscuras y la luz baja poco a poco hasta quedarse completamente a oscuras. Pero lo último que deja de verse es el brillo de los ojos dejando una imagen bastante cadavérica.

Supongo que es porque ahora lo tengo muy visto pero no resulta demasiado emocionante la declaración de intenciones del principio de la peli donde vemos trozos de película de celuloide, audio reproduciéndose hacia atrás. Si hay algún criterio para cuándo recordar que estamos viendo una ficción, no lo he sabido encontrar.

La película es algo críptica pero creo que es bastante evidente que habla de la relación de una persona con su alma. De hecho esto en castellano queda más meridiano que en sueco. Alguien sueco a lo mejor no entiende por qué Elisabeth escribe a su doctora hablando indistintamente de su alma y de Alma. Alma por ejemplo es quien realiza los movimientos de un ser endemoniado. Elisabeth escucha el drama de Alma con un gozo en sus ojos maravilloso. El alma sufre pero es la persona quien se enriquece con esto.

Hay una cierta resonancia al cine de Godard. Por ejemplo, antes de que la película llegue a su escena central, los personajes hablan a cámara. Hablan de ellos mismos y cuentan trozos de su pasado. Imposible no acordarse de “Dos o tres cosas que yo sé de ella”. Con esta peli me ha ocurrido algo que también me ocurre a veces con el cine de Godard: la primera parte de la peli se me hace lenta, hay una escena de diálogo donde se concentra el conflicto entre los personajes y cuando me quiero dar cuenta estoy enfrentando el tramo final de la peli.

La escena de diálogo principal es un monólogo porque una de las dos protagonistas no habla. Es una gran escena. Se juega mucho a fusionar los cuerpos de las dos mujeres. No dejar claro de quién es la mano que parece en plano, mezclar ambas caras… Viendo esto me da la sensación de que “Habitación en Roma” es la fantasía erótica de alguien que se aburría viendo esta escena y dejó volar su imaginación. El relato que hace Alma sobre su encuentro sexual es asombroso. Sin morbo alguno, con una riqueza en detalles inesperada…

No me gustaría olvidar nunca la escena en la que Elisabeth se aparece en la habitación de Alma por la noche. Es una secuencia magnífica. El plano es único. El sonido solo son una especie de sirenas a lo lejos. Suenan con una intermitencia muy lenta. Sale de entre unas sábanas con muchísima calma y blanquísima. Mira a Alma y desparece. Es muy hipnótica, bella y genial.


sábado, 15 de junio de 2019

FULL MONTY

Dir.: Peter Cattaneo
1997
83 min.

Con esta película me he sentido un poco traicionado. Se nos muestra su mejor cara durante la primera mitad. Nada que protestarle a su principio, premisa, presentación de personajes (la primera aparición de Steve Huison es magnífica), tono… Me enamoro absolutamente de lo que veo, me interesa la trama, los asuntos que trata. Pero en cierto momento la historia gana notas tragicómicas que no me interesan en absoluto.

Todo cuanto se nos muestra al principio grita con acento británico. Todo lo relacionado con la trama del protagonista con su exmujer parece escrito por productores estadounidenses que han decidido que se necesita una mayor implicación emocional por parte del espectador. Cuanto más se aleja la peli del tono británico, más fuera me siento.

El tema principal de la peli es la fragilidad masculina. Un asunto muy presente actualmente aunque con un enfoque muy distinto. La peli va de hombres cuya valía era llevar sustento a sus hogares y que se sienten fracasados al verse en paro. Es un recorrido hacia quererse a sí mismos de nuevo. Por eso cualquier plano que se base en su ridículo físico está muy fuera de lugar. De hecho hay muchas secuencias en la que esto está expresamente evitado. Sin embargo a veces llega el aire americano y nos muestran a alguien delgado, pálido y torpe como alguien de quien reírse. Es contrario al espíritu de la peli.

Es muy maravillosa la precisión en algunos gags, al principio, donde el chiste se está desarrollando en una esquinita de la pantalla, sin involucrar a los personajes que llevan el diálogo principal. Esto lo perdemos, por ejemplo, cuando dos hombres en tanga se cuelan por una ventana. Es gracioso que alguien tire cuanto hay en un aparador. No es gracioso que justo después de esto, diga ay.

El personaje del jefe está muy bien en algunas ocasiones y muy mal en otras. Curiosamente coincide con la dialéctica entre cine británico y americano. No es gracioso verle hacer cosas que no serían coherentes con su traje. Es gracioso verle hacer cosas que no son coherentes con su actitud de tipo serio. La pelea que tiene con el protagonista es muy correcta: él es un tipo que no estaría nunca en una pelea y cuando lo está se encuentra incómodo. Steve Carrel se habría puesto a gritar porque él cree que es gracioso un tipo con traje gritando.

En el mismo sentido, no entendemos por qué ocurre la escena con el protagonista y su hijo instantes antes de terminar la peli. Es evidente que va a actuar, no hay manera de que la peli acabe si no es con todos en el escenario. Pero hay un diálogo que se acerca peligrosamente a una mala película americana y que no nos gusta nada.

El ambiente del pueblo es maravilloso. Ese color ladrillo y ese acero industrial enmarcado en ese verde de Gran Bretaña. A esto ayuda un color quizás demasiado saturado pero nada fuera de lo común para ser los años 90. A cambio la imagen no tiene ningún ruido.

Hay que decir que para conseguir que el striptease final luzca, en la primera escena se evita con la cámara mostrar la actuación de los profesionales.


viernes, 14 de junio de 2019

A GHOST STORY

Dir.: David Lowery
2017
87 min.

Es muy bonita. Así sí se hace cine alternativo. Hay lucecitas místicas. Y mucha paciencia. Es impresionante cómo una cara que son solo dos ojos puede expresar tanto. Supongo que ese trabajo lo hace principalmente la música pero da un efecto tremendo. La música está estupendamente elegida. Debido a que no hay casi diálogos, se deben exprimir las interpretaciones en concreto las de la novia están impecables. Ese momento del recuerdo escuchando la música del fantasma mientras está a punto de rozar su sábana es arrebatadora. Está rodada en 4:3 y con las esquinas redondeadas.

La película habla sobre la trascendencia y sobre saber cuándo ha pasado tu momento. Se genera una historia breve pero preciosa entre el fantasma protagonista y el fantasma de la casa de al lado. Con un final muy tierno y triste.

Es explicativa lo justo. En el punto exacto. Como cuando el fantasma rechaza ir al cielo: se abre ante él una puerta de luz que lleva a la gloria y él se queda en el mundo de los vivos; tiene algo que hacer. Sabemos reconocer que el fantasma se va a enfadar sin que nos tengan que enseñar otra vez la escena. Se explica que muy pocas personas están destinadas a permanecer y cuando un ser que es eterno escucha esas palabras se enfada sin remedio echando a todas las personas de su casa.

Es reseñable el paso del tiempo. Qué es más importante para él. Cuanto más tiempo ha esperado, menos le importa seguir esperando excepto cuando llega a vivir su novia a la casa: el tiempo se vuelve a parar. Lo que realmente le importa hace que se preste toda la atención del mundo. Es capaz de pasarse quieto mirando cómo come una tarta sin poder hacer nada.

Lo más memorable de la película son los planos estáticos donde el fantasma simplemente observa sin poder interferir en un mundo que ya no es suyo. Todo lo que él era es el amor por su pareja y el lugar que le pertenece. Ahí esperará hasta que venza a la muerte.

Esta película tiene uno de los fotogramas más bonitos del cine. Me refiero a cuando sale con su sábana blanca, nueva. Sale a un campo verdérrimo y con un amanecer precioso siendo una explosión de color.


domingo, 9 de junio de 2019

CONFESSIONS

Dir.: Tetsuya Nakashima
2010
106 min.

Película de cómo el ego de un chaval puede destrozar la vida a tantas personas inocentes. Es difícil valorar las interpretaciones debido a que soy desconocedor la sociedad japonesa, pero digamos que son bastante poderosas. La maestra hierática en esa primera clase es genial.

La fotografía se divide en dos muy diferenciadas, aquellas escenas dedicadas al tiempo presente, sombría y muy gris y después las analepsis tan amarillas. También predomina la cámara lenta dejando algunos planos más afortunados que otros. La gente que corre a cámara lenta no es nada estético. Recuerda a la cámara lenta usada en el anime japonés. Muy recurrentes los planos de nubes. El cielo azul que se ve a través de las nubes y el sol reflejadas en ellas, combinados con la fotografía son muy poéticos. Incluso el plano que puede resultar vacío del niño atrapando una mariposa no parece fuera de lugar.

Por otro lado, geniales los giros de guion con constantes sorpresas siempre haciendo más tétrica la historia. La forma de rodar la violencia. Muy sangrienta pero poco explícita completamente efectista hasta convertir todo en un caos absoluto. Al fin y al cabo, no es lo importante quién muera o cómo ocurra, simplemente el entorno del protagonista se tiene que desmoronar.

La película está en gran parte narrada. Esto no hace que la, quizá excesiva, verbalización sea muy evidente. Además, como los saltos temporales, son continuos no llama la atención cuándo son para explicar algo de la trama o simplemente está ahí estéticamente.

Puede que la banda sonora deba tener alguna continuidad. Son músicas cortas e inconexas que al final no te proporciona nada sonoro a lo que aferrarse.

Es mi segundo visionado y, de nuevo, maravillosa.


sábado, 8 de junio de 2019

SEÑALES DEL FUTURO

Dir.: Alex Proyas
2009
130 min.

La película es mala y además tenemos a Nicolas Cage. Una especie de mensaje de que “hay que tener fe”. Un apocalipsis. Unas referencias Bíblicas evidentísimas para justificar lo injustificable. Pero con una introducción de una película de terror. El personaje que predice el apocalipsis, Lucinda, tiene una historia lo suficiente desarrollada para tener un vínculo con ella. De repente desaparece el personaje y apenas se le referencia.

¿Por qué el niño al final de la película necesita seguir escribiendo en la mesa cuando le quitan el papel? Lucinda se esperó hasta que tuvo una puerta que arañar. El muchacho no tuvo que desollarse las uñas para escribir tres o cuatro números. La niña sangra por escribir ocho números. Una pregunta importante ¿Qué narices está prediciendo el niño si el fin del mundo va a llegar ese mismo día?

Los efectos especiales penosos. Una violencia que no se puede mostrar explícitamente para evitar censuras. Vemos un tren arrasar un andén y de cuando en cuando salen volando gotas de sangre porque alguna víctima habrá. El mejor ejemplo de esto es el momento de destrucción del mundo entero. No hay sensación de catástrofe, solo una nube de polvo avanzando. Ese es el gran enemigo de la humanidad: nubes de polvo.

El personaje protagonista tiene un gran fallo: está interpretado por Nicolas Cage. Una continua cara de preocupación le quita cualquier emoción que pueda necesitar el personaje. Esta es la primera película suya que veo en versión original. Pensé que su mayor mal era el doblaje, craso error. Por otro lado, tiene un espíritu de liderazgo muy intermitente. No olvidemos su alcoholismo que solo se da por las noches y, cuidado, no todas.

TODO MAL.


viernes, 7 de junio de 2019

EL NACIMIENTO DE UNA NACIÓN

Dir.: D.W. Griffith
1915
190 min.

La peli empieza asegurando que no tienen miedo a la censura porque saben que lo que van a contar fue real y que defienden la libertad y bla, bla, bla… El paralelismo con según qué enemigos de la corrección política es llamativo.

La película habla de la guerra civil y sus años posteriores desde la perspectiva de una familia del sur. La primera hora de la película veos cómo una familia sufre por la guerra. Todas las penurias que pasan en su casa son muy poco interesantes, pero las escenas de guerra son muy llamativas. Para empezar llama la atención que el tipo de armas que usan haya que recargarlas después de cada disparo. Independientemente de a qué esté enfocando la cámara siempre se ve a gente recargando los cañones. Esto llena de muchísimo humo las escenas y es impresionante de ver. Esto a pesar de que la calidad de la imagen no es la mejor posible. Se aprovecha también para que nuestro confederado protagonista dé agua a un unionista moribundo y los del bando del norte celebren su heroicidad.

Desde este momento cada vez que se haga referencia a este hombre lo llamarán el pequeño capitán. Es un hombre humilde que será machacado solo por haber perdido la guerra. Y que solo busca justicia para la gente que no piensa como los del norte.

El intertítulo que precede al asesinato de Lincoln lo anuncia como una tragedia. No estamos seguros de si se refiere a la muerte del presidente o a la posterior liberación de los esclavos. De cualquier forma el asesinato está hecho maravillosamente. Por supuesto la peli se asegura de mencionar que todo es una construcción muy fiel y de apuntar las fuentes históricas. El sucesor de Lincoln implanta las leyes de liberación de los esclavos y empieza la segunda parte de la peli. Empiezan a ocurrir cosas gravísimas. Para empezar hay personajes positivos que le sugieren al nuevo presidente que no sea tan extremista como para la liberar a los esclavos, que piense en la gente del sur.

Aparece un mulato que será elegido por los negros para que gobierne en su favor. Toda la peli aparece como un ser sucio y feo. Más adelante se convierte en un personaje negativo. Pero en el primer momento, que es un personaje neutro, por ser multo ya debe aparecer con un aspecto distinto al resto de blancos. Se dedica bastante rato a contar todas las atrocidades que hizo este hombre a los blancos. Esto ralentiza mucho la narración. Se incluye entre estas medidas la legalización del matrimonio entre personas de diferente raza.

Los intertítulos ayudan mucho a explicitar el racismo de la peli. Si todo se desarrollara con diálogos los juicios de valor no serían tan visibles. Sin embargo se está narrando continuamente las acciones políticas que ocurren y no se hace en absoluto de manera imparcial. Una obra artística no tiene la obligación de ser imparcial, pero esta precisamente se vanagloria de ser una recreación histórica.

Lo que hace el pequeño capitán para devolver la paz a su pueblo es crear el KKK. Por supuesto las túnicas las cosen las mujeres. Hay un intertítulo que dice algo así como incluso las mujeres ayudaron. No sé si el número de extras era muy grande, pero dado que no existía el gran angular, parece que el ejército de los caballeros del Klan es enorme.

Cuando el KKK masacra a los negros hay una escena de desarme que es lamentable. Cuando los negros sueltan las armas salen corriendo. Puede que este sea el momento más racista de la peli. Un negro no es nada a no ser que lleve un arma con él. De hecho hay una escena donde un blanco se pelea con 6 negros a pecho descubierto y muere solo cuando dos negros le disparan.

Entre los intérpretes de los negros se mezclan blancos con la cara pintada y gente negra de verdad. Me intriga mucho saber cómo vivieron los negros ese rodaje. En los intertítulos se remarca bastante que los criados fieles, que siguieron con su trabajo para los blancos pese a la abolición, eran bondadosos. La idea es transmitir que no todos los negros eran malos.

Al final de la peli hay unas elecciones para echar al mulato del poder y se dice que esas elecciones sí fueron justas. En el plano inmediatamente posterior hay negros votando mientras el KKK les observa a un par de metros. El mensaje de la película es el del conservadurismo de toda la vida. Que no hay que remover la sociedad porque esto genera violencia. Tras esto hay un montaje excelente que contrapone la violencia con la paz. Para la violencia muestra una especie de infierno lleno de negros y al fondo un animal embravecido. Para la paz se ve a Jesucristo superpuesto a un apacible prado lleno de blancos. Una de las alegorías más alucinantes que ha visto.

La copia de la peli creo que no es la mejor del mundo, pero la fotografía era lamentable. Especialmente en exteriores los blancos (el color) están muy quemados. Es muy notable en una escena en los campos de algodón. Es muy difícil distinguir nada en esa escena que no esté en primer término. Hay una escena de interior que para dar la impresión de que todo está lleno de humo se oscurece la imagen. Aquí el equilibrio entre blancos y negros está muy bien. Toda la imagen se vuelve mucho más nítida.

En el cine mudo es habitual que un intertítulo diga estaba muy enfadado y el siguiente plano sea de alguien expresando enfado. No sé si es a posta o por error pero es frecuente que en planos de este estilo haya un salto. El plano es fijo por lo que lo único que salta es el personaje. En películas un poco independientes del Siglo XXI lo vemos como un recurso habitual. Me ha sorprendido verlo en esta peli.

La película utiliza en ocasiones el zoom en un momento donde no existía el zoom. Para ello lo que hace es poner en negro todo el plano salvo el trozo donde quiere hacer el zoom. El efecto es magnífico.


domingo, 2 de junio de 2019

HOLY MOTORS

Dir.: Leos Carax
2012
111 min.

Película estrella en los rankings de películas raras y ella lo disfruta. Para empezar la distribuidora no ha perdido la oportunidad de poner en la caja del DVD al personaje pelirrojo de traje verde.

La película habla sobre la identidad, el trabajo de actor, la realidad y la ficción… Dado que la gente que se dedica a hacer películas inevitablemente pasa mucho tiempo con actores, es habitual que sea un tema recurrente en el cine. En “El show de Truman” se explora ya este concepto por poner el ejemplo más evidente. Debido a las muchas películas que hablan de un tema tan tópico es complicado que se aporte nada nuevo. Esta película es perfectamente consciente de ello y en vez de dedicar largos discursos a temas trascendentes, explota la forma con suma maestría.

El argumento es sencillo, una empresa que quiere de un actor con talento todo su tiempo y a éste cada vez le cansa más su trabajo. Mientras le vemos ejercer su profesión vemos a un actor en toda regla. Estamos avisados todo el rato de que estamos ante un espectáculo. El personaje protagonista es un actor y hemos venido a esta película a verle actuar. En algún momento en mitad de la película se nos recuerda que estamos viendo una película. Pero se hace de una forma maravillosa, con unas preciosas imágenes de fotogramas antiguos o con una repentina bajada de la calidad de imagen.

Es prodigioso que el único momento en el que no está actuando de repente todos los diálogos son una caricatura nada grotesca de los diálogos de películas americanas de los 50. Una pareja en un lugar abandonado que les trae muchísimos recuerdos, diálogos evocadores y un número musical. Maravilloso. Hasta ese punto llega el delirio de esta azafata que se suicida sin dejarnos muy claro si interpretaba y el hombre calvo no sabe distinguirlo o si realmente se ha suicidado.

El final es de una elegancia absoluta. Cuando la historia ha terminado de forma evidente todos esperamos un fundido a negro en ese plano del garaje. Es un final satisfactorio, no hay ninguna queja. De repente un giro sorprendente, delirante y divertido. Cuando parece que va a ser solo una broma aparece un coloquio magnífico, sutil. Y termina de una forma mucho más elegante y redonda.


sábado, 1 de junio de 2019

SENDEROS DE GLORIA

Dir.: Stanley Kubrick
1957
86 min.

Del cine antiguo es envidiable la simplicidad de sus tramas. Los personajes son claros al igual que sus motivaciones. Las historias tienen héroes y no nos preocupamos por la falta de realismo. La historia trata de Kirk Douglas y de su grandeza. Cómo teniendo un cargo pequeño es quien tiene mayor talla moral.

El juego de toda la peli es la diferencia entre la guerra de palacio y en las trincheras. Cómo camina el general por los tablones de madera de la trinchera saludando a los soldados como quien pasea por la calle. La presentación de este personaje es muy buena. No solo le vemos con esta soberbia ante los soldados sino que al poco tiempo tiene la conversación con el coronel Dax en la que planean la toma del Hormiguero. La gran diferencia con estos soldados y los que vemos en “La chaqueta metálica” es que aquí son estrategia. Se habla de ellos según las conveniencias de la guerra. En “La chaqueta metálica” lo que se pretende es convertirles en máquinas de matar.

La película es muy estética. Especialmente los planos de Douglas. Con una iluminación y encuadres más cuidados que al resto. En la escena de la ejecución es el momento más evidente. El sol cae fuertemente quemando los blancos y él tiene unas sombras para marcar cada expresión facial.

El sonido con mucha frecuencia envejece bastante mal en las películas antiguas. En este caso las voces están muy correctas no tanto el sonido de las ametralladoras alemanas. Donde la suciedad del sonido colabora muy positivamente en la película es para la música militar. Los tambores de redoble crean una atmósfera maravillosa para el momento inmediatamente anterior a salir de las trincheras para atacar el hormiguero. O los tambores fúnebres durante la ejecución. O el último momento del murmullo de los soldados cantando con una mujer del enemigo. También es muy hábil el momento del juicio cuando Douglas quiere defender a los soldados inocentes que mientras que la acusación se ha escuchado como una exigencia al tribunal, la defensa se escucha como un riego. Se sube el eco de la voz. Suena como un discurso engrandeciendo al personaje.

De los tres acusados justamente se da mayor protagonismo al que hace un papel menos interesante. La interpretación no es particularmente buena al contrario que la de sus otros dos compañeros. En especial, mencionaré a Joseph Turkel el más delgado de los tres. Quien no hace una actuación muy buena es el gran general. No hay nada en su personalidad que nos haga ver el gran poder que tiene además de su traje especialmente condecorado.

Mis felicitaciones a este epílogo donde se muestra la verdadera motivación de Dax: reivindicar el comportamiento humano.